Por casi más de un siglo los científicos han sospechado de un planeta desconocido está asechando en el borde de nuestro sistema solar, pero ahora hay nueva evidencia que habla de la existencia de ese misterioso “Planeta X”.
Puedes dividir nuestro sistema solar en cuatro partes, los planetas rocosos en el interior, el Cinturón de Asteroides, los gigantes gaseosos, y un gran grupo de cuerpos helados pequeños llamado el Cinturón de Kuiper
Algunos de esos trozos de hielos pertenecientes al Cinturón de Kuiper son lo suficientemente grandes para ser contados como planetas enanos, tal como lo es Plutón y Eris.
Pero los científicos creen que algo más grande, incluso cuatro veces más grande que la tierra, está asechando el borde del Cinturón de Kuiper, de acuerdo con investigaciones publicadas este 20 de enero en la revista The Astronomical Journal.
“Hemos encontado evidencia de que hay un planeta gigante en las afueras del sistema solar,” dijo el astrónomo Mike Brown a Popular Science. “Y por ‘gigante’ nos referimos a uno del tamaño de Neptuno, y cuando decimos ‘en las afueras del sistema solar’ nos referimos de 10 a 20 veces más lejos de lo que está Plutón.”
Desde el 2003, Brown y otros astrónomos han descubierto a seis nuevos planetas enanos orbitando en la franja del Cinturón de Kuiper. Todos parecen seguir un patrón de órbita similar, aunque es un patrón muy extraño.
Su extraña pero sincronizada órbita sugiere que algo mucho más grande está allí afuera que los está halando. Brown y otros científicos creen que ese algo es un gran “Planeta X.”
Puedes ver abajo una ilustración de cómo lucen las órbitas al rededor del sol. El anillo morado representa a los 6 planetas enanos. Mientras que el anillo amarillo es su sugerencia de donde pudiera estar el Planeta X o Noveno Planeta:
Todos los planetas que conocemos orbitan mucho más cercano al sol en el diagrama que vimos.
Si este gigantesco “Planeta X” existe, probablemente no lo hemos hayado porque está tan lejos que sería increíblemente pequeño para su descubrimiento aun, de acuerdo con una investigación relacionada del astrónomo Scott Sheppard. Está cerca de 200 veces más lejos del sol de lo que lo está la Tierra, por lo que sería extremadamente tenue para poder verlo.
A pesar de que es una evidencia bastante tentadora de que exista un planeta gigante rondando allí afuera, puede que haya otra explicación de porqué estos planetas enanos tengan esta órbita tan desviada. El problema es que los investigadores no tienen suficientes conocimientos de estas áreas lejanas de nuestro sistema solar.
Brown se ha asociado con el astrofísico Konstantin Batygin para intentar cambiar esto. Ellos crearon un mapa de código abierto, publicado en The Astronomical Journal, que espera descubrir por cálculos dónde podría estar escondido.
Ellos estarán usando el telescopio Subaru en la cumbre del Mauna Kea en Hawaii para casar a más planetas enanos que puedan estar siendo influenciados por este misterioso planeta. Brown y Batygin estiman que podría tomar incluso 15 años en hallarlo, de acuerdo con la revista Popular Science.